SERVIDORES DE LA BESTIA
pr Angel Rodríguez Alvarez
Al término de la Primera Guerra Mundial, Alemania fue duramente represaliada por las naciones aliadas que participaron en esa guerra.
Los alemanes esperaban obtener una paz más o menos negociada, más o menos pactada, pero los aliados quisieron que el castigo fuese ejemplar y que los alemanes deberían pagar duramente los daños económicos ocasionados por esa conflagración.
El Tratado de Versalles de 1919 fue una humillación deliberadamente buscada contra el pueblo alemán, y su aceptación por parte de sus políticos hizo que éstos perdiesen toda confianza y apoyo del pueblo a partir de ese momento.
Alsacia y Lorena pasaron a las manos de Francia y Prusia pasó a las de Polonia.
También perdieron todas sus colonias, sus industrias siderúrgicas, sus ferrocarriles y su fuerza naval y mercante.
Durante 15 años Renania estuvo ocupada y Alemania tuvo que limitar su ejército. Se les hizo responsables únicos de la Guerra y por ello deberían afrontar los gastos cuantiosos como reparación y grandes indemnizaciones.
Todo ello no hizo que la paz se instaurase de una manera firme y duradera, sino en un equilibrio inestable y muy peligroso. Se sembró la semilla del odio y se abonó el campo para la aparición o el desarrollo de movimientos extraños, esotéricos, que culminaron con el nacimiento del nazismo, cuya cabeza visible fue Adolf Hitler, a quien la población recibió con entusiasmo y esperanza. Al menos así ocurrió con la mayor parte del pueblo alemán.
Hay por tanto dos facetas que dieron como resultado la Segunda Guerra Mundial, que fue una especie de continuación de la Primera.
Desempleo, miserias económicas, desilusión, odio, desmoralización, deseos de revancha y otras causas fueron aprovechadas oportunamente por Hitler y su movimiento nazi, quienes fueron presentados públicamente como los salvadores de la patria, poniendo a los judíos como chivos expiatorios de todas las desgracias.
La otra faceta, que fue uno de los motores de lo que sucedió en esos terribles días y que normalmente no es aceptada por analistas e historiadores tiene una profunda componente mística y esotérica.
Pero la mente de Hitler no podía ser quien idease el gigantesco drama que se iba a iniciar.
Alguien estaba detrás de todo éso. Grupos de mentes perversas y enloquecidas por delirios místicos fueron la mecha y el combustible que iba a incendiar Europa y el mundo entero.
La cosa venía de atrás, pues muchos de estos grupos esotéricos venían desde el siglo XIX buscando su oportunidad de salir de la oscuridad. Sólo se necesitaban las condiciones necesarias para arrastrar a la población y un personaje que llevase a cabo todo cuanto se hizo, dirigido como una marioneta. Una marioneta muy peligrosa, eso sí.
Surge un símbolo ancestral, la Svástica, una ideología que proclamaba la supremacía de la raza aria y la necesidad de crear al Superhombre que iba a dominar el planeta. Se crea una doctrina que determinará las condiciones en que se desarrollará el Reich de los Mil Años.
Resultado de todo esto son millones de víctimas que no parecían saciar a las bestias que se ocultaban en la oscuridad y de las que Adolf Hitler era su cabeza visible, su servidor, su esclavo.
Como escribieron Louis Powles y Jaques Bergier en su libro “El Retorno de los Brujos”, publicado en el año de 1960:
“...No somos tan locos como para querer explicar la Historia por las sociedades secretas. Pero sí que veremos, cosa curiosa, que existe una relación y que, con el nazismo, “otro mundo” reinó sobre nosotros durante algunos años. Ha sido vencido. Pero no ha muerto, ni al otro lado del Rhin ni en el resto del mundo. Y no es eso lo temible, sino nuestra ignorancia”.
Hay una especie de sincretismo místico entre las filosofías occidentales y las orientales, muchas de cuyas barbaridades provenían del Budismo, que siempre hemos creído algo sensato, prudente, serio y elevado, pero tales conceptos están muy lejos de la realidad.
Europa, y no sólo Europa, era un hervidero de ideologías y movimientos ocultistas, que siempre estuvieron ahí, escondidos y maquinando contra la Humanidad:
Orden Cabalística de la Rosacruz, Francmasones, Golden Dawn, Teosofistas, Espiritistas y un largo etc.
Algunas de estas filosofías o movimientos estaban supuestamente en contacto con unos superhombres, unos seres que decían de sí mismos ser de una naturaleza distinta a la del ser humano, jefes secretos del Tercer Orden. Estas Logias invocaban a dioses de Panteones que ya estaban extinguidos.
¿Locura?. ¿Fanatismo por exacerbación religiosa?.
Sea como fuere, estas historias son terroríficas, y en su propia naturaleza pueden ser el justificante de que esta parte de la historia de los tiempos de Hitler se mantenga en secreto o simplemente se niegue.
El mismo Hitler hablaba de los 9 Superiores Desconocidos, frente a los cuales se ponía enfermo y llegaba a echar sangre por la boca y los oídos, tan impresionante era su presencia.
La Golden Dawn dirigida por Mathers era una de las que tuvieron una influencia tremenda en los movimientos ocultistas europeos y por ende alemanes.
Mathers decía de los Superiores Desconocidos:
"...Ni siquiera conozco sus nombres, y en raras ocasiones los he visto en cuerpos físicos ... Mis encuentros con ellos me han mostrado lo difícil que es para un mortal, por muy avanzado que esté, soportar su presencia ...
No quiero decir que durante mis pocos encuentros con ellos haya experimentado los mismos sentimientos de intensa depresión física que acompaña a la pérdida de magnetismo. Al contrario, la sensación era la de estar en contacto con una fuerza tan terrible que sólo puedo comparar con lo que usualmente experimenta una persona a la que un relámpago cae muy de cerca durante una violenta tormenta; esto unido a una dificultad respiratoria parecido al efecto estrangulador del éter. Debido a mi práctica en el trabajo ocultista, no puedo concebir que un iniciado mucho menos avanzado sea capaz de soportar una tensión de tal magnitud, ni aún durante unos minutos, sin que le sobrevenga la muerte..., La postración nerviosa después de cada encuentro es terrible y va acompañada de sudores fríos y hemorragias de la nariz, la boca y los oídos..." .
Esto me recuerda los pasajes de la Sagrada Biblia, donde se dice que la presencia de Dios era tan imponente, que nadie podía estar ante El sin correr el riesgo de encontrar la muerte. En las Escrituras Sagradas se dice que Moisés sólo pudo ver parte de la Gloria del Señor, y siempre a través de un ángel que lo representaba. Era tan imponente esa presencia divina, que Moisés estuvo “emitiendo rayos o resplandores durante un tiempo. (Exodo, 33.21-23, 34. 5-7, 29, 30).
Entonces dijo Moisés: “Déjame ver, por favor, tu gloria. “El le contestó: “Yo haré pasar ante tu vista toda mi bondad y pronunciaré delante de ti el nombre de Yahveh, pues hago gracia a quien hago gracia y tengo misericordia con quien tengo misericordia.” Y añadió: “Pero mi rostro no podrás verlo, porque no puede verme el hombre y seguir viviendo.” Luego dijo Yahveh: “Mira, hay un lugar junto a mi. Tú te colocarás sobre la peña. Y al pasar mi gloria, te pondré en una hendidura de la peña y te cubriré con mi mano hasta que yo haya pasado. Luego apartaré mi mano, para que veas mis espaldas, pero mi rostro no se puede ver”. (Ex. 33, 18-23).
En el caso de estos “super hombres”, evidentemente nada hay que pueda certificar estas afirmaciones como veraces y sólo se ha podido constatar su existencia en los Archivos de la Golden Dawn, pero son curiosas estas similitudes.
Durante cierto tiempo estuve interesado en las actividades de la Golden Dawn y me parecía incomprensible que personas cuerdas y racionales pudieran creer en tales actos y aceptar tales ideologías.
De ser cierto todo cuanto estamos tratando, se confirmaría que cuanto ocurrió en esos terribles días de la conflagración mundial estuvo, efectivamente dirigida por la mano de una realidad ajena a nosotros. Y estaría claro que el no haber conseguido sus objetivos se debería a que hubo una segunda intervención, contraria a estos seres, sean quienes sean, que impidió que el horror se consumase.
También se confirmaría que los conocimientos científicos de los nazis fueron, en una gran parte, cedidos por estos seres tan terribles.
No todos los conocimientos se les entregaron en su forma completa o en su forma más avanzada, pero sí lo suficientemente avanzada para que los nazis hubieran podido conquistar el planeta.
Avances en armamento, que superaba en eficacia al de los aliados. Tal vez si los nazis hubiesen tenido suficiente tiempo antes de ser vencidos, otro hubiera sido el resultado de la guerra.
Existe una parte no aclarada suficientemente, sobre los avances en aeronáutica, con aparatos que reúnen las características de lo que entendemos por discos voladores, que hubieran permitido al III REICH la salida al espacio exterior. Incluso se habla de viajes a la superficie de la Luna y al planeta Marte.
El secreto sobre todo este tema es férreo y salvo una parte muy pequeña de información, poco o nada contrastada, nada hay que nos permita adentrarnos profundamente en el tema.
¿Por qué tanto secreto en torno a esta parte digamos “misteriosa” de la Segunda Guerra Mundial?. La respuesta podría estar si fuese cierto cuanto estamos comentando, pues a ver quién notifica a la opinión pública mundial la existencia de esos terribles seres y su interferencia en nuestra realidad.
De alguna forma deberemos admitir que, en ocasiones, ese secreto podría estar justificado, pero ¿no sería igualmente peligroso ignorar la existencia de esos seres, de ser cierto que existen?.
Estamos hablando de seres de naturaleza demoníaca.
Crowley y su Golden Dawn realizaron todo tipo de excesos, llevando a cabo orgías heterosexuales, sacrificios de animales, flagelaciones cruentas, sodomía y otras barbaridades “mágicas”. Tomaban también el “Elixir de la Vida”, elaborado a base de las secreciones sexuales masculinas y femeninas.
Pero si a la Golden Dawn no se la puede acusar de asesina, si bien realizaba prácticas aberrantes, a la Sociedad Thule, que tuvo una influencia decisiva en el desarrollo del nazismo sí se le acusa de ser una sociedad de asesinos.
En cualquier caso, todas ellas estaban interconectadas de una manera general. todas formaban parte de esa aberración llamada Sociedad Secreta, (cualquiera de ellas), que aún hoy sigue estando ahí, teniendo entre sus filas a grandes personajes de las monarquías, de la Política, Banca, etc.). Todos ellos servidores de la Bestia.
René Guénon cree que todo cuanto ha sucedido hasta ahora no son más que ensayos, experimentos de alguna clase y que los falsos mesías que hemos conocido hicieron tan sólo prodigios de calidad inferior. Quienes fueron sus seguidores fueron personas fáciles de embaucar. Pero se pregunta: “¿Quién sabe lo que nos reserva el porvenir?.
Insiste en que se repetirán una y otra vez hasta obtener el éxito. Dice que no cree que los ocultistas de las diferentes sociedades secretas tengan la fuerza suficiente por sí solos semejante empresa, por lo que supone que algo más terrible, desconocido de lo que sus propios jefes no son más que simples instrumentos, como lo fue el propio Adolf Hitler.
¿De qué estamos hablando, entonces?.
Cuando yo digo que los tiempos de la Segunda Guerra Mundial fueron una interferencia de otra realidad con la nuestra, digo bien. Presiento que esa otra realidad es la que representa a los dioses o ángeles caídos. De ser así, esperemos que alguien les haga frente e impida que consigan ese objetivo de emular a Dios, creando una super raza que suplante a la nuestra.
Rudolf Steiner creía que las sociedades secretas proceden del mundo subterráneo del Mal y eran anuncio de una Edad Demoníaca. Fue considerado por los nazis como un enemigo muy peligroso, el enemigo número uno del nazismo. Los matones nazis disuelven sus reuniones por la fuerza, amenazan a los discípulos y los obligan a huir de Alemania. En el año de 1924 incendiaron el centro construido por Steiner en Dornach, Suiza.
Los archivos se queman y Steiner no puede trabajar, muriendo de dolor en 1925.
Steiner denunciaba y luchaba contra el Mal, y el Mal acabó con él.
¿Qué estará preparando el Mal en la actualidad contra este mundo?.
REFERENCIAS Y FUENTES:
Libro “EL RETORNO DE LOS BRUJOS”. L. Pauwels y J. Bergier. PLAZA Y JANES S.A. EDITORES. Barcelona 1975
Sociedades Secretas:
http://es.scribd.com/doc/13838278/SOCIEDADES-SECRETAS-REVELACIONES-DEL-SIGLO-XX
WIKIPEDIA: La Segunda Guerra Mundial:
http://es.wikipedia.org/wiki/Segunda_Guerra_Mundial |